Cuando a veces sentimos que el mundo se acaba y pensamos que error cometimos para sufrir lo
que estamos sufriendo, nos desgastamos, nos enojamos con nosotros mismos por no
aceptar en su momento ciertas circunstancias, en ese momento no estamos
capacitados para pensar que dios nos puso a prueba para ver que tanta confianza
podía depositar en nosotros.
Cuando ya desquitaste tú coraje, ya sacaste todas las lágrimas
de rabia, de tristeza, de angustia, es cuando dices gracias Dios por darme otra
oportunidad, revisas tú interior
espiritual que te aconseja y te dice quien eres en realidad, revisas tú sabiduría y conocimientos que has forjado por muchos años de estudio y
preparación, revisas tú físico completo y en perfectas condiciones, revisas tú
carácter noble con quien lo merece pero
aguerrido con quien te ofende o maltrata a los tuyos, es cuando dices gracias
Dios por abrirme los ojos y darme todo lo que me has dado, no me hace falta nada
y te das cuenta que tienes todo para triunfar, lo único que tienes que hacer es buscar la punta
de la madeja, con persistencia, con trabajo, con responsabilidad, con la luchar
día a día para no darse por vencida resolviendo los problemas con decisiones y
actitudes positivas y quitando aquellos que te estorban o detienen y buscando los que te pueden ayudar a mejorar
lo que ya tienes, hasta llegar al corazón mismo de tú triunfo, de la razón de
tú existencia en esta vida.
Estimados mientras tengamos un latido en nuestro corazón y personas que nos quieran y nos ayuden tenemos todo para salir adelante en lo que nos proponemos, así que a tomar las mejores decisiones para triunfar en la vida que nos tocó vivir. Saludos
Ceci González
24-Ago-2013
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